Las brujas como seres mágicos del imaginario popular son muy recurrentes en las historias, leyendas, y testimonios de los pueblos mexicanos, sin embargo, por esta ocasión no me voy a referir a las brujas guajolote, o a las brujas gato, cerdo de las historias plagadas de magia. En esta ocasión me referiré a las brujas que habitan las ciudades y pueblos de México, herederas de la tradición mágica más allá de la conquista y que se han modernizado con nuevas prácticas y estrategias.
La noche es fría, la bruja ha colocado una vela preparada n la mesa,
encendida la vela y el contexto general es de bruma. Comienza una batalla
campal en la cual un alma está siendo atormentada esa misma noche. Las brujas
mexicanas suelen trabajar de madrugada concentrándose en la persona de la cual
desean doblegar su voluntad. La persona en cuestión no sabe que está siendo
atacada, pero al día siguiente podría levantarse con el inicio de una grave e
inexplicable enfermedad o la suerte le podría abandonar.
Mi abuela me confesaba que esas batallas campales implicaban tener una
voluntad fuerte para no sucumbir al sueño y a muchos otros distractores,
algunos terroríficos como eran los ruidos extraños, movimiento inexplicable de
las cosas y la presencia de sombras.
La magia negra es aquella que tiene por objetivo doblegar a otra persona
para que haga lo que el brujo desea. Esto incluye amarres amorosos, embrujos
para alejar, separar, o incluso enfermar hasta la muerte. La magia negra no
puede justificarse en el hecho de querer “alejar a alguien para bien”,
cualquier acto en el que se manipule el libre albedrío es magia negra, aun si
el objetivo es bueno.
Muchas veces he escuchado a algunas supuestas brujas publicitarse y
decirse brujas porque realizan algún preparado o hechizo la mayoría de las
veces poco efectivo, pero las verdaderas brujas saben que el hechizo es solo un
catalizador de poder mental
La bruja o brujo más fuerte es el que tiene una mente más fuerte y mayor
voluntad. Cuando yo tendría unos 10 años alguna vez escuché de mi abuela que "El
brujo más poderoso no es el que dice conjuros más raros o hace más menjurjes,
es aquel que tiene más fuerza en su mente".
Hace unos días platicaba con una bruja mexicana que ha participado en
investigaciones científicas sobre el tema de la brujería y me confirmó que las
brujas mantienen tremendas luchas campales de manera telepática.
Cuando una persona observa fuera de su casa que
le han hecho un “daño” es decir un hechizo, la persona se asusta y enferma. En
gran medida es el miedo al mismo daño lo que enferma a la persona. Por eso,
mientras más aterrador es un embrujo más posibilidades existen que la persona
enferme.
Así los objetos mágicos se llenan de poder, el
poder proviene de la mente del brujo. Los talismanes y amuletos pueden ser muy
poderosos mientras mayor poder mental se les ha cedido. Pero ¿Cuáles son esas
estrategias para mentalizar que utilizan las brujas?
La primera es dar a conocer a la persona que ha
sido hechizada.
La segunda es crear un hechizo que visualmente
se observe poderoso, o aterrador si es el caso. Lo mismo vale para los hechizos
que son para la fortuna y el amor, mientras más extraordinario se ve el
preparado, este dará mejor resultado.
La tercera es que la gente comparta la misma
cultura. Un brujo mexicano hechizará a gente de su misma cultura, pero una persona
que cree en la brujería y la magia de cualquier cultura podría ser hechizada.
Esto nos lleva al último factor:
La creencia, tanto el brujo como el embrujado
deben creer. Si uno de los dos no cree en el poder, el hechizo no funciona.
Así la bruja pasa las horas mentalizando,
creando una conexión de poder y dominio sobre los objetos y la víctima.
¿Basta con ser más fuerte y no dejarse
convencer para estar a salvo del hechizo?
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