La poción del amor

Me quejè con mi chamana de mi suerte en el amor. Me había ido mal la última vez por razones que escapaban a mi voluntad y me sentía deseosa de iniciar una nueva relación y al mismo tiempo llena de miedo. Ademàs me quejé con ella:
-A pesar de trabajar junto a un basurero, ni las moscas se me paran-. Le dije yo quejumbrosa.
-¿Estas decidida a cerrar el capitulo anterior?-.
-Si, ya ha pasado mucho tiempo y no puedo seguir con un enganche así a alguien que no tuvo interès en mi.
Me mirò despreocupada, y me dijo -a bueno, eso solito llega, pero debes anunciarte como disponible. Simplemente avisa a todos que estas disponible-.
Tenia una cara tan "indiferente y aburrida" que me sorprendió. Luego tomo una actitud risueña y entro corriendo a uno de los cuartos de su casa (una casa antigua y misteriosa). Salió con un par de  botellas de plàstico y se reía como niña traviesa.
-Una es para tomar y la otra es para untar-.
-¿Que es esto? pregunté.
Tu has caso. Anunciate soltera y disponible.
Bueno, no tenía nada que perder. Así que aquella agua de rosas "lo supe por el olor" y que contenía no se si pelos de araña y pipi de mosquito, pero perfumada llegó a mi casa.
Mirè sonriente las botellas. Mi lado psicòloga me dice que todo talismàn tiene su fuerza en el poder de la mente, pero...
No pierdo nada... :)
Ahora entiendo la sonrisa traviesa de mi adorable chamana, siempre me sorprende.